bacteria carnívora
Micrografía electrónica de barrido coloreada de bacterias Streptococcus del grupo A (Streptococcus pyogenes) (amarillo) y un neutrófilo humano (azul). Crédito: NIAID/ Wikimedia Commons

Los casos de síndrome de shock tóxico estreptocócico (STSS, por sus siglas en inglés), producidos por el Streptococcus pyogenes, conocido como estreptococo del grupo A (EGA), también llamado bacteria carnívora, han experimentado un considerable aumento en Japón.

Según datos del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (NIID) hasta el 2 de junio se confirmaron 977 casos, que ya supera los 941 que se detectaron en todo 2023. Según las últimas cifras disponibles han muerto 77 personas.

Citado por la televisora pública NHK, Kikuchi Ken, profesor de la Universidad Médica Femenina de Tokio, indicó que en algunos casos no es posible identificar la causa de la infección. Le preocupa el aumento de pacientes, “ya que es un indicio de que algo fuera de lo normal está sucediendo”.

“Las personas mayores de 65 años constituyen la mayoría de los pacientes”, dijo al ser consultado por The Japan Times. “Las bacterias a menudo entran a través de lesiones menores en los pies, como llagas y erupciones”, agregó.

bacteria carnívora
Micrografía electrónica de barrido coloreada de bacterias Streptococcus del grupo A (Streptococcus pyogenes) (azul) y un neutrófilo humano (púrpura). Crédito: NIAID/ Wikimedia Commons

¿Qué es la bacteria carnívora?

El Streptococcus pyogenes o bacteria carnívora “es un patógeno grampositivo exclusivo para humanos, responsable de más de 500.000 muertes anualmente en todo el mundo”, señalan Sowmya Ajay Castro y Helge C. Dorfmüller en un artículo publicado por la Royal Society.

Al infectar, el Streptococcus pyogenes “comúnmente desencadena síntomas leves como faringitis, pioderma y fiebre”. Sin embargo, infecciones recurrentes o la exposición prolongada al estreptococo “puede provocar afecciones potencialmente mortales”, indican las autoras.

En el artículo enumeran estas enfermedades que “contribuyen a tasas de mortalidad muy altas en los países no industrializados”: fascitis necrotizante (también llamada enfermedad carnívora), el síndrome de shock tóxico estreptocócico (STSS) y las enfermedades postinmunitarias como la glomerulonefritis postestreptocócica, la fiebre reumática aguda (IRA) y la cardiopatía reumática (EHC).

Una vacuna exitosa para la profilaxis del EGA sigue pendiente, advierten, aunque señalan que es sensible a la penicilina y en algunos casos a la amoxicilina y las cefalosporinas.

Indican que “es alarmante saber que el Streptococcus pyogenes podría estar en camino de volverse resistente a los antibióticos recetados con más frecuencia, incluida la penicilina y la amoxicilina”.

¿Cómo se transmiten las infecciones producidas por la bacteria carnívora?

El Streptococcus pyogenes solo se encuentra en humanos, a diferencia de los grupos B, C y G, que son patógenos humanos y veterinarios.

“Aunque los humanos son el huésped biológico exclusivo de este patógeno, las infecciones por EGA pueden imitarse en primates no humanos como modelos de infección”, explican Castro y Dorfmüller.

La principal propagación, exponen las autoras, “se produce a través de la transmisión de gotitas de aire contaminadas de persona a persona”.

El Streptococcus pyogenes sobrevive en la piel y dentro del huésped durante horas o días.

“Los avances recientes en la investigación sobre la transmisión han demostrado que el EGA puede acceder al torrente sanguíneo del huésped a través del sistema linfático”, agregan.

El primer síntoma de infección es la aparición de faringitis.

¿Qué es el síndrome de shock tóxico estreptocócico?

El síndrome de shock tóxico estreptocócico “está definido por la presencia de una infección invasiva por Streptococcus pyogenes asociada a shock y fallo multiorgánico”, indica Lorenzo Rodríguez en un artículo publicado en la revista Cirugía Plástica Ibero-Latinoamericana.

“Es una infección rápidamente progresiva que afecta la piel, tejido celular subcutáneo, fascia superficial y ocasionalmente la profunda, puede producir también necrosis hística y severa toxicidad sistémica”, detallan Joel Víctor Castel Mercado y Erika Patiño en otro trabajo.

Especifican que a través de los años se ha llamado de diversas formas: gangrena estreptocócica, celulitis sinergística, celulitis anaeróbica no clostridial, celulitis necrotizante, gangrena de Fournier y erisipela necrotizante.

Castel Mercado y Patiño advierten que pacientes con infección por VIH, cáncer, diabetes, enfermedades pulmonares o cardíacas, infecciones por el virus de la varicela zoster, así como los adictos a drogas y los alcohólicos son más susceptibles de padecer STSS.

Castro y Dorfmüller afirman que el síndrome de shock tóxico estreptocócico fue documentado por primera vez en la década de 1980 en los países occidentales, incluidos Estados Unidos y Europa.

Una de las terapias ampliamente aceptada para su tratamiento “son las inmunoglobulinas intravenosas”.

Una vacuna universal contra el Streptococcus pyogenes

Las autoras advierten que es difícil desarrollar una vacuna que ofrezca cobertura para todos los serotipos.

La Organización Mundial de la Salud enumera el Streptococcus pyogenes como la novena enfermedad infecciosa que afecta a personas en todo el mundo.

Una resolución de la Asamblea Mundial de la Salud de 2018 exige mejor control y prevención.

La bacteria carnívora está en Latinoamérica

El 15 de diciembre de 2022, la OMS alertó sobre el aumento de casos producidos por el Streptococcus pyogenes en al menos cinco países de Europa.

El 19 de diciembre del mismo año la Organización Panamericana de la Salud publicó una nota informativa en relación con la ocurrencia en Uruguay de enfermedades infecciosas relacionadas con el Streptococcus pyogenes, identificando 21 casos hospitalizados en centros de salud de 8 departamentos.

El Ministerio de Salud de Argentina publicó el 7 de noviembre de 2023 una actualización epidemiológica de casos, indicando que se registraron 487 casos de infección invasiva por EGA en todo el país, con 78 fallecimientos.

Servicio de hem
Hospital de Niños J. M. de los Ríos

¿Llegó a Venezuela la bacteria carnívora?

No hay datos estadísticos que corroboren casos de cuadros infecciosos producidos por el Streptococcus pyogenes, la llamada bacteria carnívora, en hospitales y centros de salud venezolanos. Sin embargo, en artículos de revistas arbitradas médicos especialistas detallan situaciones que se les han presentado y en las que pacientes han sufrido síndrome de shock tóxico estreptocócico.

Un artículo publicado en abril de 2019 en la revista Vitae, escrito por Jennifer Rojas, Damaris Acosta y Andreina Yanes, médicos del Hospital Domingo Luciani, de Caracas, detalla el caso de una bebé de 19 meses de edad con síndrome de shock tóxico estreptocócico, que luego del tratamiento presentó mejoría.

“Desarrolló manifestaciones clínicas con lesiones costrosas en miembro inferior izquierdo con edema, dolor a la palpación, flictenas de contenido hemático y posterior necrosis de tejido; complicado con hipotensión arterial, alteración del sensorio, seguido por hipertensión arterial, alteración del sensorio, seguido por hipertensión arterial hasta evolucionar a afectación de tres sistemas (cardiovascular, renal y neurológico)”, explican los autores.

Otro trabajo del Acta Científica Estudiantil, revista de la Sociedad Científica de Estudiantes de Medicina de la Universidad Central de Venezuela, da a conocer “dos casos de enfermedad invasiva secundarias a Streptococcus pyogenes presentados entre los meses de febrero y octubre de 2014, hospitalizados en el servicio de pediatría del Hospital General de Carúpano, estado Sucre”.

En el Hospital de Niños J. M. de los Ríos, en Caracas, también se documentaron casos de celulitis entre 1995 y 1998. Se revisaron al menos 57 historias clínicas de pacientes afectados.


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