reina Isabel
John F. Kennedy, George H.W. Bush y Barack Obama forman parte de la extensa lista de presidentes de Estados Unidos con los que la reina Isabel II se ha reunido. Joe Biden es el decimotercero. Fotos: AP / AFP / AFP

La foto oficial que la reina Isabel II se tome el domingo con Joe Biden en el Castillo de Windsor será de colección. En los últimos 70 años, la monarca británica –que ya ha roto varios récords por su longevidad en el cargo– se ha reunido con 12 de los últimos 13 presidentes de Estados Unidos en funciones. Solo Lyndon Johnson no figura en el impresionante álbum que forma parte de la evolución de las últimas décadas de relación entre Washington y Londres.

Desde que fue recibida en 1951 por Harry Truman, cuando todavía era princesa, Isabel II -que este sábado celebra su 95 cumpleaños “oficial”-, y el duque de Edimburgo realizaron muchas visitas de Estado u oficiales a Estados Unidos, y fueron anfitriones de citas similares en el Palacio de Buckingham y el Castillo de Windsor.

“A pesar de la formalidad de estas ocasiones, algunas, como la visita de Ronald Reagan en la década de 1980 y la de Barack Obama en el 2011, fueron bastante relajadas. Otras, como la más reciente de Donald Trump, fueron menos cómodas debido a la personalidad del mandatario republicano”, dice a El Comercio Joe Little, editor en jefe de la revista “Majesty People”.

El experto en la monarquía británica recuerda que, por ejemplo, los Reagan agasajaron posteriormente a la reina y al príncipe Felipe en su rancho de California, y que la relación con los Obama fue tan cordial que tuvieron un almuerzo dominical privado con la pareja real en el castillo de Windsor, al que llegaron en helicóptero y luego fueron conducidos por el Príncipe Felipe (a sus noventa años).

Entre sus encuentros más notables con los presidentes de Estados Unidos tampoco se puede dejar de mencionar la visita de Eisenhower tras la crisis de Suez.

Además, Frank Prochaska, historiador y autor de varios libros sobre la monarquía dice que “las visitas de los Kennedy en 1961 y de los Obama más recientemente fueron notables sobre todo por el glamour de los eventos, que ayudaron a cimentar la ‘relación especial’ entre los dos países”.

Isabel, influencia en ascenso

Isabel II es monarca y jefa de Estado, más que jefa de Gobierno. Eso significa que puede mantenerse al margen de la política. “Aunque, por supuesto, para sus primeros ministros es increíblemente útil en calidad de asesora, dado que ahora está en el 70º año de su reinado y tiene una enorme experiencia”, dice Joe Little.

Prochaska enfatiza que la Reina, como parte “digna” de la constitución, hace todo lo posible por mantenerse al margen de la política. La constitución británica, que separa al ejecutivo del jefe de Estado, brinda algunas ventajas a la figura de la reina ya que la monarca puede proporcionar consenso y un foco de orgullo nacional en tiempos de tensión política.

“La monarca británica tiene una influencia considerable, en el extranjero como brazo real del Ministerio de Asuntos Exteriores, y en casa a través de su gran número de organizaciones benéficas. No cabe duda de que mantendrá una reunión agradable con el presidente Biden y que informará al Primer Ministro durante sus encuentros semanales con ella en el Palacio de Buckingham”, señala el experto.

Joe Biden y su esposa Jill llegaron esta semana al Reino Unido, primera etapa de una gira europea, en la que se reunirán con líderes y mandatarios de varios países. Isabel II no podía ser la excepción.

Para Prochaska, puede decirse que “la influencia de la reina ha aumentado con el tiempo debido a su larga experiencia con los políticos estadounidenses y otros líderes mundiales, que ven en una visita a Palacio una buena publicidad en casa”.

Por ejemplo, las fotos de Reagan y la reina montando a caballo en el Gran Parque de Windsor fueron una gran publicidad para el presidente. El prestigio real se consolidó cuando la reina se dirigió a una reunión conjunta del Congreso en 1991.

“En definitiva, la reina ha sido una notable embajadora de Gran Bretaña tanto en su país como en el extranjero. Ningún político tiene nada parecido a sus índices de popularidad, por lo que ha habido poco entusiasmo por el republicanismo durante su reinado”, explica Prochaska.

A continuación, repasamos algunas de las postales más recordadas de los encuentros de la reina Isabel II con los inquilinos de la Casa Blanca.

1. Harry Truman (1951)

Isabel
Isabel II fue recibida por Truman en la Casa Blanca cuando aún era princesa. Foto: AFP

2. Dwight D. Eisenhower (1957)

Isabel
Eisenhower fue anfitrión de la reina durante su primera visita de Estado a Estados Unidos. Foto: AP

3. John F. Kennedy (1961)

Isabel
La visita de los Kennedy al Palacio de Buckingham es recordada, entre otras razones, por el glamour del evento. Foto: AP

4. Richard Nixon (1970)

Nixon conoció a la reina en el Palacio de Buckingham poco después de convertirse en presidente. Foto: AP

5. Gerald Ford (1976)

Ford e Isabel bailaron durante una cena de Estado en la Casa Blanca. Foto: AFP

6. Jimmy Carter (1977)

Carter describió el Palacio de Buckingham como “uno de los lugares más hermosos” que había visto. Foto: AP

7. Ronald Reagan (1982)

Las fotos de Reagan y la reina montando a caballo en el Gran Parque de Windsor fueron muy comentadas. Foto: AP

8. George H.W. Bush (1991)

Isabel
Isabel II devolvió en Washington la visita que Bush padre le había hecho en 1989. Foto: AFP

9. Bill Clinton (2000)

Clinton y su familia fueron recibidos por la monarca en el Palacio de Buckingham. Foto: AFP

10. George W. Bush (2003)

Bush hijo se reunió con la reina en una visita de estado a Gran Bretaña. Foto: AFP

11. Barack Obama (2011)

La reina y Obama posan en la Sala de Música del Palacio de Buckingham antes de un banquete de Estado. Foto: AFP

12. Donald Trump (2019)

Isabel II y Trump durante el aniversario 75 del desembarco del Día D, en el sur de Inglaterra. Foto: AFP

Por Milagros Asto Sánchez/ Periodista de Mundo

[email protected]


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!