Oscar
Foto EFE

Pedro Almodóvar dice que no le gusta teorizar ni hacer futurología. Pero en una entrevista con Efe, con motivo de la presentación de Dolor y gloria en el Festival de Cine de Nueva York, opina que su último filme tiene muchas posibilidades de hacerse con el Oscar.

«Yo creo que estamos muy bien situados», afirma el cineasta en un céntrico y colorido hotel de Manhattan, Estados Unidos, donde la cinta se estrenará el 4 de octubre.

Almodóvar deja muy claro que no quiere adelantarse «porque luego la realidad te puede dar un disgusto». Sin embargo, destaca que lo que dicen los medios de comunicación suena muy prometedor.

«A partir de ahora ya empieza lo que ellos llaman la carrera hacia los Oscar. Todos tienen sus quinielas y sus apuestas», expone el manchego, que ya cuenta en su palmarés con dos de esas estatuillas.

Carrera por el Oscar

El filme ha sido seleccionado para representar a España en la categoría de Mejor Película Internacional, en la que apunta que son tres títulos los que suenan con fuerza: Parásitos, del surcoreano Bong Joon-ho, Les Misérables, del francés Ladj Ly, y su Dolor y gloria.

«Esto es lo que hay en los medios, pero a veces se equivocan también. No es la Biblia, no es una ciencia exacta, pero creo que estamos muy bien situados», repite el manchego.

Además, señaló que su actor protagonista, Antonio Banderas, también despunta en las quinielas. «Lo que sí puedo decir es que en todas las apuestas de todos los medios Antonio está entre los cinco favoritos. No he visto una lista en la que no aparece Antonio», dice.

Pero Banderas, con quien no trabajaba desde hacía nueve años y cuyo papel ha sido descrito por The New York Times como sublime, no es el único candidato de la cinta para hacerse con un Oscar. El rol de Almodóvar, tanto de director como de guionista, también aparece entre los predilectos.

«En muchas de ellas, tal cual lo he leído, yo como director y como guionista no estoy entre los cinco, estoy en el número siete u ocho en varias de ellas. Esto es lo que leo, entonces te da esperanzas», explica.

Almodóvar de cerca 

Aunque los estadounidenses conocen bien su cine, como atestiguan los Oscar que se llevó por Todo sobre mi madre (1999) y Hable con ella (2002), Almodóvar cree que ha vuelto a sorprender de forma positiva a la crítica y al público con su último filme.

«Pensaba que iba a ser al revés. Que al ser una película tan íntima y tan personal iba a interesar menos», expone el director.

«Pero justamente el hecho de que mi intimidad se refleje de un modo tan claro en la película ha hecho que la gente la vea más cercana», agregó.

Esta particularidad, el carácter personal, fue la que hizo dudar a Almodóvar cuando estaba escribiendo el guion y sentir un momento de vértigo.

«No sabía si debía seguir o no. Soy una persona muy pudorosa y significaba buscar muy dentro de mí los elementos importantes que hacen que la historia sea la historia que cuento», confiesa.

«Hay determinadas secuencias que reflejan momentos claros de mi vida. Pero una vez que ya llevas la mitad del guion escrito ya tenía suficiente distancia como si no estuviera hablando de mí», aclara.

Edad de oro

Tras este proyecto personal, y después de cumplir 70 años de edad esta semana, Almodóvar ve muy lejos retirarse de su oficio. Opina que los años más maduros de un cineasta vienen a partir de los 60.

«No hay la misma noción de jubilación que en otras profesiones. En mi caso no me he cansado de esta profesión, al contrario, sigo sintiendo casi más pasión que al principio», señala.

«Sigo escribiendo, pensando en futuros proyectos. De momento, mientras no se retire el público, que nadie vaya a ver alguna de mis películas, yo seguiré aquí», asegura.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!